En esta cuadra
yo podría ser, en esta sombra,
y esta casa de ladrillos y enredadera,
con una, dos,
tres, cuatro escaleras
de hierro en la fachada.
Se puede
entrar y salir, y subir y bajar.
Al frente, hay una plaza
como todas las plazas para niños del mundo
"Hi little boy”
despierta a su bebé negro la madre
de falda ancha
y casi almidonada.
En un umbral , un hombre gordo con tiradores
se ha sentado y se deja
caer, se deja caer.
Rascacielos
transparentes se levantan
a espaldas de la cuadra, pero los ignoramos.
La mañana es espléndida,
¿quién tiene ganas de tenerles lástima?
“Hi, little boy, hi
little boy,
mami is alone
but happy”.
Josefina Trebucq